*I Concurso Nacional de Poesía Javier Adúriz
sábado, abril 30, 2011
Concurso Nacional de Poesía Javier Adúriz
*I Concurso Nacional de Poesía Javier Adúriz
jueves, abril 28, 2011
Premio Alejandría 2011, de Cuento breve
Condiciones de participación:
7° La información sobre el desarrollo del Premio, como así también sus resultados, ganadores y fechas de entrega de premios, se podrá seguir en el blog del Grupo: www.elgrupoalejandria.blogspot.com y en la web de Fedro Libros: www.fedrolibros.com.ar
Selección de las candidaturas y el jurado:
2° Los cuentos seleccionados serán remitidos a los miembros del jurado, quienes se encargarán de elegir el ganador.
3° Durante las diferentes etapas de selección se guardará el anonimato de los participantes, a fin de asegurar la transparencia e imparcialidad del premio.
4° El jurado encargado de elegir el ganador y el orden de los finalistas estará compuesto por los escritores Elsa Drucaroff, Gustavo Ferreyra y Luis Chitarroni.
(...)
Ganadores y finalistas:
1° El ganador del “Premio Alejandría 2011 de Cuento Breve” recibirá un vale de 500 pesos para solamente disponer del mismo en concepto de libros en la librería Fedro Libros, además de ser publicado su cuento en la antología del Premio.
2° El 2do premio recibirá un vale por 300 pesos bajo el mismo concepto que el ganador.
3° El 3er premio recibirá un vale por 200 pesos bajo el mismo concepto que el ganador.
4° Los otros 10 finalistas serán premiados sólo con la publicación de sus textos en la antología del Premio Alejandría.
miércoles, abril 27, 2011
martes, abril 26, 2011
John Donne: "Observo al médico, y veo que tiene miedo..."

Kafka: El jinete del cubo: Comentario de Ítalo Calvino


lunes, abril 25, 2011
Agenda: Pan y Arte
La cita es en Pan y arte (y vino), Boedo 876, Buenos Aires.
Gonzalo Rojas: In memorian
o la luz de la muerte? ¿Qué se busca, qué se halla, qué
es eso: ¿amor? ¿Quién es? ¿La mujer con su hondura, sus rosas, sus volcanes,
o este sol colorado que es mi sangre furiosa
cuando entro en ella hasta las últimas raíces?
¿O todo es un gran juego, Dios mío, y no hay mujer
ni hay hombre sino un solo cuerpo: el tuyo,
repartido en estrellas de hermosura, en partículas fugaces
de eternidad visible?
Me muero en esto, oh Dios, en esta guerra
de ir y venir entre ellas por las calles, de no poder amar
trescientas a la vez, porque estoy condenado siempre a una,
a esa una, a esa única que me diste en el viejo paraíso.
sábado, abril 23, 2011
Paul Klee: La flecha

viernes, abril 22, 2011
Chau, Adúriz
El nadador
Las últimas piletas son agrias. Llueve
tanto o más de lo pensado, aun
cuando los jazmines revienten
y las enredaderas se aúpen a los árboles.
Creeme..., no se puede creer. Los huesos
hablan y el animal afina por debajo
una canción indescriptible. Igual,
no se quiere dejar de sonreír.
Hay algo en los recuerdos, vale decir,
en el seco ahora, en el puro y desaforado
ahora, que no importa demasiado
si el resto se vuelve confuso y breve,
fragmentario. Lo interesante está aquí,
en este aquí del tiempo, aunque la casa
finalmente esté sola... o vieja... o devastada.
........ para Jorge Olivero
jueves, abril 21, 2011
Paul Klee: Ideología

Paul Klee: La fuerza creadora...
Paul Klee: Los doctores de la escritura...
Teoría del Arte Moderno, Cactus, serie perenne, 2008.
miércoles, abril 20, 2011
Alejandro Castro: El verano de las adivinas
Cuadernos de pensamiento poético: convocatoria
Luis Cano: El diario de Carmen
CARMEN: Gaby Ferrero
JUAN: Mauricio Minetti
DIRECCIÓN DE VOCES: Tian Brass
ESPACIO Luis: Cano
REALIZACIÓN ESCENOGRÁFICA: Víctor Salvatore
CARPINTERÍA: Guillermo Manente
DISEÑO INTERIOR, UTILERÍA Y VESTUARIO: Lorena Ballestrero y Laura Rovito
ILUMINACIÓN: Mariano Arrigoni
MÚSICA: Mega Cisterna Magna
COREOGRAFÍA: Luciana Acuña
PIEZAS GRÁFICAS: Laura Rovito
ASISTENCIA GENERAL: Micaela Piccarelli
DRAMATURGIA Y DIRECCIÓN: Luis Cano
ESTRENO JUEVES 5 DE MAYO - 21 HORAS
ELKAFKA Espacio Teatral - Lambaré 866 - Reservas 4862-5439
Entradas $ 50.- Descuentos Est. y Jub. $ 40.-
http://www.alternativateatral.com/obra20154-el-diario-de-carmen
martes, abril 19, 2011
lunes, abril 18, 2011
Agenda: Si vas para Quilmes el martes 26 de abril...
Agenda: Las Malvinas: La guerra y las palabras
domingo, abril 17, 2011
Gracias a todos los amigos/as...
sábado, abril 16, 2011
Revista Eñe: Si me dan a elegir...
viernes, abril 15, 2011
martes, abril 12, 2011
Hilos Editora: Biografía sumaria de Milo De Angelis

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lunes, abril 11, 2011
Elías Canetti: La lengua absuelta

*Elías Canetti nació en Bulgaria en 1905. Premio Nobel de Literartura, 1981.
**Este texto está incluido en el libro La lengua absuelta (Ed. Raíces, Barcelona, 1980).
sábado, abril 09, 2011
Katherine Mansfield: Sopla el viento
-¡Una perfecta idiota! Imagínate, dejar todo en la cuerda con un tiempo como éste... Ahora mi mejor mantel de Tenerife está hecho jirones. ¿Qué es ese olor tan raro? ¡Se quema el guisado! ¡Oh, cielos, este viento!
-Mamá, te llaman por teléfono. Teléfono, mamá. Es el carnicero.
"¡Qué horrible es la vida... un asco, simplemente un asco!" Y ahora, para colmo, se le ha roto el elástico del sombrero. Por supuesto. Se pondrá su vieja boina y se escabullirá por atrás. Pero mamá la ha visto.
-¡Matilde! ¡Matilde! ¡Regresa de inmediato! ¿Qué diablos te has puesto en la cabeza? Parece un cubretetera. ¿Y por qué tienes esa melena cubriéndote la frente?
-No puedo demorarme, mamá. Llegaré tarde a mi clase.
-¡Regresa de inmediato!
No lo hará. No lo hará. Odia a su madre.
-¡Vete al infierno! -grita, y corre calle abajo.
En olas, en nubes, en grandes remolinos el polvo golpea, trayendo con él briznas de paja y pedregullo y abono. Los árboles de los jardines rugen y, desde el fondo de la calle donde vive el señor Bullen, llega el lamento del mar: “¡Ah..., ah... !”.
Pero la sala del señor Bullen está silenciosa como una caverna. Las ventanas están cerradas; entrecerrados los postigos, y ella no ha llegado tarde. La chica-que-está-antes ha comenzado a tocar “A un iceberg”, de MacDoweIl. El señor Bullen le lanza una mirada y esboza una sonrisa.
-Siéntate -le dice. Siéntate en un rincón del sofá, damita.
Qué divertido es. No es que se ríe de uno, exactamente..., pero hay algo... ¡Oh, qué tranquilo está todo aquí!
Le gusta esta habitación. Huele a sarga, a humo rancio y a crisantemos... hay un gran jarrón lleno de crisantemos sobre la chimenea, junto a la desteñida fotografía de Rubinstein... a mon ami Robert Bullen... Sobre el negro y reluciente piano está colgado “Soledad”, un cuadro que representa a una mujer morena y trágica vestida de blanco, sentada sobre una roca con las piernas cruzadas y el mentón apoyado en las manos.
-¡No, no! -dice el señor Bullen, y se inclina sobre la otra chica y toca ese pasaje en el piano, pasando sus manos por encima de los hombros de la otra. ¡La muy estúpida... se sonroja! ¡Qué ridícula!
Ahora la chica-que-está-antes se ha ido, la puerta del frente se cierra de un portazo. El señor Bullen regresa y camina de arriba abajo muy suavemente, esperándola. ¡Qué extraordinario! Sus dedos tiemblan tanto que no puede deshacer el nudo de su carpeta de música. Es el viento... Y su corazón late con tanta violencia que le parece que le levanta y le baja la blusa con cada latido. El señor Bullen no dice una palabra. En el ajado y rojo taburete del piano entran dos personas. El señor Bullen se sienta junto a ella.
-¿Empiezo con las escalas? -pregunta ella, retorciéndose las manos-. También tenía unos arpegios.
Pero él no responde. Ella cree que ni siquiera la ha oído... y entonces, de repente, su fresca mano, la que tiene el anillo, se extiende y abre el tomo de Beethoven.
-Vamos a hacer algo del viejo maestro -dice.
Pero por qué le habla con tanta amabilidad... con tantísima amabilidad... y como si se conocieran desde muchísimo tiempo atrás, y lo supieran todo uno de otro.
Lentamente, él vuelve la página. Ella observa su mano... es una mano hermosa y siempre parece recién lavada.
-Estamos aquí -dice el señor Bullen.
Oh, esa voz amable. Oh, ese movimiento: en tono menor. Aquí vienen los pequeños tambores...
-¿Hago la repetición?
-Sí, pequeña.
Su voz es demasiado, demasiado amable, las corcheas y los trinos bailan de arriba abajo en el pentagrama como negritos sobre una cerca. Por qué es tan... Ella no llorará... no tiene por qué llorar...
-¿Qué te pasa, pequeña?
El señor Bullen le toma las manos. Su hombro está justo junto a su cabeza. Se apoya un poquitito en él, pone su mejilla contra la áspera tela.
-La vida es tan horrible -murmura, pero no siente en absoluto que sea horrible. Él dice algo acerca de “esperar” y “marcar el tiempo” y “ese raro ser que es una mujer”, pero ella no lo escucha. Es tan cómodo esto... para siempre...
De repente la puerta se abre y aparece Marie Swanson que ha llegado horas antes de su clase.
-Toca el alegretto un poco más rápido -dice el señor Bullen, y se levanta y empieza a caminar de arriba abajo una vez más.
-Siéntate en el rincón del sofá, damita -le dice a Marie.
El viento, el viento. Es aterrador estar aquí sola en su cuarto. La cama, el espejo, el jarro y la jofaina blancos relucen como el cielo. La cama es lo más aterrador. Allí está, profundamente dormida... ¿Acaso mamá se imagina por un momento que ella zurcirá todos esos zoquetes anudados sobre la colcha que parecen serpientes? No lo hará. No, mamá. No veo por qué debo hacerlo... ¡El viento..., el viento! Hay un raro olor a hollín que se cuela por la chimenea ¿Alguien le ha escrito poemas al viento...? “Traigo flores frescas a las hojas y lluvia”... ¡Qué tontería!
-¿Eres tú, Bogey?
-Vamos a caminar por la explanada, Matilde. No aguanto más.
El impermeable de Bogey es igual al de ella. Abrochándose el cuello, se mira en el espejo. Tiene el rostro pálido, los dos tienen los mismos ojos excitados y los labios calientes. ¡Ah, qué bien conoce a esos dos del espejo! Hasta luego, querido, regresaremos pronto.
-¡Vamos! ¡Vamos! ¡Acerquémonos más!
El mar está muy alto por encima de la escollera. Se quitan los sombreros y el pelo se les vuela hasta la boca, con gusto a sal. El mar está tan revuelto que las olas no rompen sino que golpean contra el áspero muro de piedra, absorbiendo las algas de los goteantes peldaños. Una fina llovizna de agua de mar azota la explanada. Bogey y ella están cubiertos de gotas, en la boca siente un sabor frío y húmedo.

-¡Más rápido! ¡Más rápido!
Ya está muy oscuro. En el puerto, las barcazas carboneras tienen dos luces: una en el mástil y otra en la popa.
-Mira, Bogey. Mira allí.
viernes, abril 08, 2011
Laura Klein: Seminario Lecturas del Génesis

Mario Sampaolesi, Malvinas en Rumania
jueves, abril 07, 2011
Agenda: Algunos ciclos de lectura de Poesía
Lunes 4 de abril, a las 19.
Pje. Discépolo 1830 (mts. Av. Callao).
Coordina: Mirta Vidazo.
Luz del Porvenir
1º y 3º miércoles de cada mes, 15 h.
Dupuy 1135 (barrio Versalles).
Micrófono abierto.
. Zoológico de Poetas
Todos los miércoles, a las 21.
Empujón del Diablo. Ángel Carranza 1969.
Poetas invitados: Micrófono abierto.
Coord.: Coni Banús e Ignacio Osorio.
ASOLAPO-Argentina
Jueves 7 de abril, 16 a 19.
Biblioteca del Barco Centenera. Venezuela 1538.
Luz Samanes Paz, de Cusco, Perú.
. Lectura: Grupo A.L.E.G.R.Í.A
Homenaje al poeta: Atilio Castelpoggi.
Asociación Latinoamericana de Poetas.
Entrada libre.
. Tercera bacanal literaria de autores en su voz
Jueves 14 de abril a las 21:00 en Archibrazo.
Mario Bravo 437.
Laura Klein / María Malusardi / Mariano Fiszman.
Coord.Eduardo Rubinschik y Paco Redondo.
Entrada libre y gratuita.
Presentación de libros
. Jueves 7 de abril 19:30.
Casa de la Lectura Lavalleja 924.
Doble cielo, de Julio Salgado.
Editorial Argonauta.
. Viernes 8 de abril 18:30
Librería Eterna Cadencia. Honduras 5582
Lejana y oscura, de Susana Aguad
Presentan: Irma Verolín, Susana Szwarc y Martín Andrade.
Paradiso Ediciones.
Agenda: Ediciones en Danza: Leónidas Escudero
Agenda: Encuentro Editoriales Independientes
Se trata de un encuentro con las editoriales independientes, que se ralizará el segundo jueves de cada mes.
Agenda: Ciclo de poesía, Interiores: Mariana Brebbia
El lobo inmóvil, habla y dice: que me devore algo desesperado.
Los niños vuelven cada tarde al espacio de los colibríes.
Bautizan con nombres franceses a las fieras, las bautizan con colores,
adelantándose al amor.
Lanzan frutas a la nieve y llaman a eso "calor".
Algo aquí -por primera vez- no debe ser atenuado.
.............................................
Para despertar,
el rubor de los lirios,
–esos lirios que ceden-
Para despertar ,
la rosada lengua de los pájaros
y la parte más violenta de la voz.
Confundes el árbol de espinos con las cosas inocentes-
Los animales grandes –los dóciles, más tarde-
corren la cría de tus pasos.
En tu imagen -sólo en una parte de ella-
se enciende ese perfil íntegro que apaga la edad de las estrellas.
No podrá el salvaje competir con tu apariencia oscura,
con la bruma y el oriente,
con la orilla.
El gran y amado mar,
el desierto y su calor, su invierno nocturno.
Las flores y su desigual aroma.
miércoles, abril 06, 2011
Armando Zamora: Poesía Latinoamericana Hoy, el sueño bolivariano hecho realidad
Palabras de Armando Zamora* en la presentación de la antología Poesía Latinoamericana hoy 20 paíseses, 50 poetas. Universidad Tecnológica de Hermosillo. Hermosillo, Sonora, México. 29 de marzo de 2011.
"La palabra antología proviene de las raíces griegas anthos (que expresa “flor”) y legein (“escoger”), y significa literalmente ramillete o selección de flores.
En el año 100 a. de C., el cínico Meleagro de Gadara compiló el libro Stéphanos, que incluyó a 47 autores griegos, y en cuyo prólogo describe la obra como una guirnalda, pues identifica a cada poeta seleccionado con una flor simbólica, estableciendo para la posteridad el término antología como sinónimo de colección de poemas.
Así, antología se refiere históricamente a una colección de las obras de mayor calidad o más representativas de uno o varios poetas, aunque en la actualidad otros géneros literarios —inclusive, de variadas disciplinas del saber— también han echado mano de estas recopilaciones y del concepto, quitándole la exclusividad al campo de la literatura.
La antología, al tratarse de un compendio de lo más importante y representativo que han producido una o varias personas a lo largo de su trayectoria, resulta una herramienta esencial para conocer y profundizar en el trabajo de esos personajes. Y es precisamente una antología lo que nos reúne esta tarde: “Poesía Latinoamericana Hoy. 20 países, 50 poetas”, compilada por el admirable escritor Roberto Arizmendi.
Como señala el subtítulo, el compendio incluye a cincuenta poetas de veinte países, sin importar edad, corriente poética ni ideología: lo que los une es la calidad de sus obras, y el objetivo del volumen es promover la integración entre los poetas del continente.
Como dice el poeta y autor de diversas antologías de autores mexicanos y extranjeros Héctor Carreto en la presentación de esta obra: “Más que una antología propiamente dicha, esta reunión es una muestra viva de la poesía que se está escribiendo y publicando hoy día en Latinoamérica... “Una muestra es más libre que una antología, aunque no es menos exigente.
La presente selección busca revelar, no canonizar. Al no incluir a poetas muertos en esta muestra, por ejemplo, el lector seguramente tendrá la sensación de estar ante palabras recién hechas; palabras recién salidas del horno…”
En una hermosa edición en la que se respeta el tono de los autores al utilizar una letra pequeña y con remates, promovida por Ediciones Fósforo, de México; Editorial Arandurá, de Paraguay; Barataria Libros, de Argentina, y la Universidad Tecnológica de Hermosillo, este tomo reúne textos en español de poetas de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Paraguay, Panamá, Perú, Puerto Rico, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.
¿Quién lo diría? En esta cálida publicación encontramos voces que vuelven realidad el sueño del libertador Simón Bolívar: hacer una sola patria de las antiguas colonias españolas en América. Todos los cantos y todos los rasgos posibles están aquí, compartiendo estas 168 páginas de manera dinámica, construyendo verso a verso la gran casa del idioma americano, ése que nos une con sus luminosos significados, su sabor, su ritmo, su color, su aroma, su dolor y esa venturosa historia que nos arropa maternalmente con todos sus puntos y sus comas.
Porque, como diría Octavio Paz en su lenguaje totalizador: “La poesía quiere cambiar la vida. No piensa embellecerla como piensan los estetas ni hacerla más justa o buena, como sueñan los moralistas. “No pretende hermosear, santificar o idealizar lo que toca, sino volverlo sagrado. Por eso no es moral o inmoral; justa o injusta; falsa o verdadera, hermosa o fea. Es simplemente poesía de soledad o de comunión. “Porque la poesía que es un testimonio del éxtasis, del amor dichoso, también lo es de la desesperación. Y tanto como un ruego puede ser una blasfemia”.
Y sí, aquí están los poetas latinoamericanos de hoy, diciéndonos que ahí afuera está la vida y sus angustias, el amor y el odio, la paz y la guerra, la caricia y la herida, la fantasía y la cotidianidad, el sueño y el despertar, pues la poesía es también un oficio que se realiza a la luz y a la sombra de los deseos humanos y nos traza caminos nuevos en los antiguos senderos mil veces recorridos. Hay que decirlo: debemos darles crédito a nuestros poetas porque la poesía es un acto de fe al que nada humano le es ajeno.
Sabemos que vivimos sumergidos en un presente dominado por el pragmatismo más insolente, por el materialismo más voraz y por una vertiginosa tecnología. Donde quiera que volvamos la vista, veremos ejemplos de ello, sea en lo local, sea en lo internacional. Vivimos en un mundo en el que se desatan trescientas guerras diarias a causa de la ambición y el egoísmo: ahora mismo lo vemos en el Medio Oriente como antes lo vimos en Centro América y en América del Sur y en el Pacífico oriental y en cada rincón de la Tierra donde haya recursos naturales que arrebatar, banderas que arriar, dioses que mancillar, religiones que borrar, dignidades que pisotear...
Hace casi tres mil años, el poeta Homero consignó en la Ilíada las mismas pasiones, la misma avaricia, la misma estulticia que esgrimen los imperios de hoy en su rabia insaciable por establecer democracias en las que para los muchos serán las barras y las estrellas sólo para unos cuantos.
Así, se dice que nuestra realidad tiene cada vez menos motivos para la poesía, porque la literatura en general no tiene una utilidad práctica: no se puede poner en la esquina más iluminada de la sala, no se puede colgar del techo como luz multicolor, no adorna las paredes ni hace juego con el centro de mesa del comedor; no la utiliza Lady Gaga en sus conciertos multitudinarios ni se escucha en las sesiones del Congreso; no podemos pagar con ella la despensa en la tienda de autoservicio ni nos salva de los cafres alcoholizados ni de los sicarios salidos de la nada: lo que nos sorprenda primero.
Pero debemos entender que la poesía no sirve para lo anterior, sino para interpretar la vida de otra forma, porque es el punto de apoyo que reclamó Arquímedes para mover el mundo, para buscar los equilibrios que ofrece el fulcro del alma mientras el agua de la vida fluye en un río que siempre es el mismo y que siempre será diferente.
Hemos sido testigos de que aún de las crisis más intensas surge la poesía como manifestación de la invencible fragilidad del espacio espiritual, porque es un misterio sustentado en la fantasía, en la imaginación, en el sueño y la irrealidad, y sirve para encontrar la manera de atrapar el instante y convertirlo en fervor y sentimiento... en un acto de fe, como ya se dijo.
Y en una época de escepticismo genuino como la que nos ha tocado vivir, donde la prioridad son la ganancia y el éxito, opuestamente a lo espiritual, desde luego que tiene sentido escribir poesía, porque como el agua, como el viento y como la luz, la poesía cambia, se adapta, se transforma, sobrevuela el tiempo como las mariposas amarillas de Mauricio Babilonia revoloteando a nuestro alrededor en una metamorfosis que la lleva a la libertad, y que nos lleva con ella en sus alas frágiles y solares.
Por eso, en la actualidad los poetas cantan realidades, se ajustan a los avances tecnológicos, hablan de bits y del ciberespacio, de la radioactividad y de lo metrosexual como hablan del amor de pareja, el que empuja a susurrarle al oído al ser querido: En este secreto puerto que he erigido, te cedo estas manos capaces de hilar los sueños y escribir una a una las letras de tu nombre hasta agotar los granos de la arena de una playa que he alucinado sólo para ti...
Poesía Latinoamericana Hoy es el ejemplo más cercano que tenemos aquí y ahora de las voces múltiples que se han trepado a los muros para ver un poco más allá de los límites que nos han marcado, y podemos encontrar en estas páginas no sólo la poesía en su formato del verso tradicional sino también prosa poética y las formas gráficas que requiere ahora la literatura para abrir las ventanas de la semántica y dejar volar verdades descarnadas, besos en la oscuridad, gritos de terror, desfiles de mendigos, el traqueteo de los automóviles en la madrugada, el paso fugaz de las estrellas en un cielo de papel bond de 75 gramos.
Nada escapa a la fascinación etérea de un poema. Nada. Porque en sí misma, la poesía es nada: es algo que no podemos asir con las manos ni untárnosla en el rostro; no la podemos explicar sino a besos o en la ausencia, en el sofoco divino del amor, en los humores de la melancolía o en el dolor de la pérdida, porque tiene una cierta capacidad terapéutica que nos hace sentir y valorar la vida aun con ese hueco que llevamos en el pecho de vez en vez.
Ya lo han dicho los expertos: la poesía se emplea para aplacar las tormentas del alma, redimir a una mujer o un hombre o llenar el corazón de ese sentimiento llamado amor. Puede, en dosis bien servidas, alimentar el espíritu, asustar una soledad y alejar una tristeza. Sirve también para reflexionar acerca de si las piedras hablan o si la luna es medicina para el mal de amores...
La poesía está hecha de maravillas, de ese fanatismo solitario que implica la terquedad de escribir historias una y otra vez hasta que los fantasmas de las palabras dejan de serlo y se convierten en las cadenas que arrastramos con cierta timidez hasta que alguien más, acaso un lector y otro y otro, nos ayuda a cargar con la cadena de las historias que nos dicta la realidad, porque a fin de cuentas todos nos convertimos en personajes de los libros imaginarios de nuestros semejantes. No en balde el poeta y académico Luis Fernando Brehm dijo alguna vez: “Si alguien lee poesía y no le gusta, no pasa nada; pero si alguien lee poesía y le gusta, algo cambia para siempre en él”.
Estoy cierto que este libro hará cambiar para bien la vida de muchos de sus lectores, que los convertirá en seres más sensibles y que podrán interpretar su entorno de manera diferente, que donde hay una casa sentirán un abrazo; que donde escuchen un susurro podrán moldear la felicidad; que donde muerdan un durazno encontrarán la ruta de donde habita el aroma más tierno del amor...
Y cambiarán por muchas razones, la principal es justamente la diversidad de voces aquí contenidas, el múltiple acento latinoamericano que nos hace y que hacemos, porque la verdadera justificación de cualquier antología radica en abrirla al azar y que cualquier texto de cualquier autor nos encante y, en el mejor de los casos, nos instigue a rastrear su nombre y el resto de su obra. Y que vuelta a abrir al azar la antología, otro texto vuelva a encantarnos. Es entonces que podemos entregarnos a merced del buen compilador.
Poesía Latinoamericana Hoy nos muestra de manera clara y sencilla que la literatura no tiene fronteras. Por fortuna, las líneas geográficas que discriminan a los habitantes del planeta en ciudadanos de primera y de segunda todavía no han podido dividir a los poetas en escritores de primera y de segunda. Esta obra nos da pistas para interpretar el entorno con todos sus silencios y sus maravillas, con su cotidianidad y su magia, con sus tragedias y su esperanza permanente de justicia para bienvenir lo que la realidad nos depara en cada esquina del poema…
Bien por Roberto Arizmendi, que no se cansa de maravillarnos con su obra y con el esfuerzo de socializar la obra de los demás. Bien por la Universidad Tecnológica de Hermosillo, que con este libro promueve el desarrollo e impulso de la cultura y las artes como parte fundamental de la formación integral del estudiante y función básica institucional. Y muchas gracias a todos ustedes por su paciencia.
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*Armando Zamora (Hermosillo, Sonora, México, 1958) estudió Licenciatura en Filosofía en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México y realizó estudios de Literaturas Hispánicas en la Universidad de Sonora. Además, realizó estudios como Técnico en Mecánica Eléctrica Automotriz y un diplomado en Procesos de Mejoramiento Continuo. Fue editor del Departamento de Divulgación Técnica en el Campo Agrícola Experimental Costa de Hermosillo entre 1983-1988. En 1992 fue Coordinador del Suplemento Culto a la cultura del Periódico El Sonorense y Jefe de Redacción del Área de Publicaciones y Encargado del Periódico UníSono. Además, se ha desempeñado como asesor de la Dirección del Instituto Sonorense de Cultura y editor de la cartelera quincenal de eventos culturales Dónde y cuándo, del mismo Instituto Sonorense de Cultura. En 1987 fue organizador de la I Muestra Estatal de Poesía del Departamento de Humanidades de la Universidad de Sonora así como editor responsable de las Memorias de la I y II Muestra Estatal de Poesía. En 1981 ganó el primer lugar en los Juegos Florales “Anita Pompa de Trujillo”; el tercer lugar en el “I Concurso del Poeta Sonorense” organizado por Gobierno del Estado de Sonora y en el año de 1984 recibió Mención Honorífica en el “II Concurso del Poeta Sonorense”. En el año de 1986 obtuvo el primer lugar en los Juegos Florales “Anita Pompa de Trujillo”. En 1988, Mención Honorífica en el Concurso “World of Poetry”. Miami, Florida. En 1990, Mención Honorífica en los Juegos Florales “Anita Pompa de Trujillo” y dos años más tarde, primer lugar en poesía en los Juegos Florales “Feria Amealco '92" en Amealco, Querétaro y Premio Estatal de Periodismo 1991 en la rama “Periodismo Cultural” en el Foro Sonorense de Periodistas. Primer lugar en el Concurso Nacional de Poesía “Alica 1992” en Tepic, Nayarit. Durante 1994 obtuvo el primer lugar en los “Juegos Florales Darío Galaviz” en Guaymas, Sonora. Primer lugar en el “Concurso del Libro Sonorense 1993”, género Poesía. Becario del Fondo Estatal para la Cultura y las Artes de Sonora (FECA), con el proyecto Breviario de literatura sonorense (Novela, cuento y poesía, 1944-1994). En 1981 publicó Cuadriludios (poemas y narraciones breves). En 1991 El Colegio Coronel J. Cruz Gálvez (revisión histórica del internado mixto de educación primaria (en co-autoría con Luis Rey Moreno Gil). En 1992 Bitácora del náufrago y otros poemas. En 1993 El que se raje es puto (novela) y Equinoccios de la soledad (poemas). En el año de 1995 Mi corazón es un gato enfermo y al borde del tejado (poemas).En 1996, Nos vemos en la melancolía, Luis Donaldo (artículos periodísticos) y El olor de los abuelos (poemas). Además, en 1998 publicó Invención de Arena (poemas), así como Navegación al interior.
Antología: Poesía Latinoamericana Hoy

