Fernando Noy: poemas
Postal sonora
Escribe y suena el aparato
Ni siquiera se levanta a contestar
Al fin logró ya no escucharlo
Aunque un teléfono sea más que alguien.
Vaivén
Tengo miedo
De caer del tiempo
Porque es el único
Dios que nos queda.
Aria
Porque das al que calla
y quitas a quien no supo dar.
Así también te incumben
asuntos tan secretos
retrocediendo lo oscuro
ante tus garras de cristal.
Advertencia
Tan solo este instante
se reserva el derecho de admisión
como una casa limpia
donde jamás entramos.
Fernando Noy. De su libro La orquesta invisible.
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