Laura Fiocca*
El sueño
Siniestra es la noche
y el espejo de la madrastra:
no me inquietan las arrugas del tiempo
me obsesiona el color
azabache o carmín
del dorado pelo
en el instante preciso del encuentro.
seré yo la blanca
Nieves?
Avatares de un amor
Todo es familiar
en el ritual
de volver
a perderte
las mañanas sin descanso
el mar rompiendo olas
en los ojos
esperarte en el umbral
de las heridas
cantar canciones
que acompañan tiempos
muertos
ser la misma
que en la víspera
quedó anclada
a tu presencia
fingirme en armonía
para volver
a encontrarte
y disolverme
iluminada
en tu sombra.
Noche umbral
Huir de la luz
abrirme una hondura más
en la noche umbral
donde las palabras
cambian de rumbo.
Mi sombra sobre tu reflejo
Espero en un bar
y un agujero asoma
en mi vestido nuevo.
Detrás del humo
rostros que conocen
el lenguaje de las cosas
una secuencia de anécdotas
en segundo plano.
Y mientras no llegás
tu ausencia es un cuerpo
cada vez más cerca
mi sombra sobre tu reflejo
un adiós
en cámara lenta.
Morada de la noche
Una coraza de luz
me perdió allí
donde no hay rostros.
Morada turbia de la noche
me devolviste ciega
a mi reflejo.
*Laura Fiocca nació en Buenos Aires en 1964. Es contadora pública y coordina talleres para el desarrollo de habilidades profesionales. Los poemas que se transcriben pertenecen a un libro que tiene en preparación.
Siniestra es la noche
y el espejo de la madrastra:
no me inquietan las arrugas del tiempo
me obsesiona el color
azabache o carmín
del dorado pelo
en el instante preciso del encuentro.
seré yo la blanca
Nieves?
Avatares de un amor
Todo es familiar
en el ritual
de volver
a perderte
las mañanas sin descanso
el mar rompiendo olas
en los ojos
esperarte en el umbral
de las heridas
cantar canciones
que acompañan tiempos
muertos
ser la misma
que en la víspera
quedó anclada
a tu presencia
fingirme en armonía
para volver
a encontrarte
y disolverme
iluminada
en tu sombra.
Noche umbral
Huir de la luz
abrirme una hondura más
en la noche umbral
donde las palabras
cambian de rumbo.
Mi sombra sobre tu reflejo
Espero en un bar
y un agujero asoma
en mi vestido nuevo.
Detrás del humo
rostros que conocen
el lenguaje de las cosas
una secuencia de anécdotas
en segundo plano.
Y mientras no llegás
tu ausencia es un cuerpo
cada vez más cerca
mi sombra sobre tu reflejo
un adiós
en cámara lenta.
Morada de la noche
Una coraza de luz
me perdió allí
donde no hay rostros.
Morada turbia de la noche
me devolviste ciega
a mi reflejo.
*Laura Fiocca nació en Buenos Aires en 1964. Es contadora pública y coordina talleres para el desarrollo de habilidades profesionales. Los poemas que se transcriben pertenecen a un libro que tiene en preparación.
1 Comments:
me gusto mucho lo que escribiste, pareces ser una persona muy sentimental que le falta afecto.. sorry pero es lo que leo en tus poemas.
Publicar un comentario
<< Home